Gloria a ti, Señor.
En aquel tiempo, envió Jesús a los Doce con estas instrucciones:
“Vayan y proclamen por el camino que ya se acerca el Reino de los cielos.
Predicar el Evangelio, no es subirse a un escenario y hacer gala de una gran elocuencia, sino de crear y recrear una charla amigable, como en familia, donde el predicador hablará explicando las enseñanzas del Evangelio, y los que están reunidos podrán también hacer sus comentarios al respecto y preguntar las cosas que no entienden o les parece confusa.
En un teatro o un templo con cientos de personas, resulta imposible mantener un dialogo.
Curen a los leprosos y demás enfermos; resuciten a los muertos y echen fuera a los demonios. Gratuitamente han recibido este poder; ejérzanlo, pues, gratuitamente.
En un templo o teatro o un estadio deportivo, sería también imposible realizar curaciones, tal vez ocurra un milagro, pero una golondrina no hace un verano, además, debemos considerar que, lo más importante es la salud del alma, los discípulos de Jesús no pudieron curar a un joven "endemoniado"- un ciclotímico que de a ratos se encuentra bien y de a ratos se encuentra mal animicamente y ocasiona grandes dificultades a la familia, estas son enfermedades del alma, y Jesús les reprocho su falta de fe, y luego les explico que ese tipo de enfermedad, se cura solo con la oración, en este caso la oración es el dialogo para descubrir las causas o la raíz del mal, y luego hacerles conocer la palabra de Dios que tenga relación con el mal en cuestión, podríamos decir que se trata de una psicología del Espíritu que cura el alma.
Las enfermedades del alma, se somatízan con facilidad y son dificiles de descubrirlas, pero para el Espíritu Santo no hay nada oculto que no pueda saberlo.
No lleven con ustedes, en su cinturón, monedas de oro, de plata o de cobre. No lleven morral para el camino ni dos túnicas ni sandalias ni bordón, porque el trabajador tiene derecho a su sustento.
Los valores materiales de nada sirven para ejercer el servicio de predicar o sanar enfermedades de todo tipo, por el contrario, solo servirían para crear dudas y que la gente mala vean que puede ser un gran negocio, y lo es, ya que muchos lo hacen.
Cuando entren en una ciudad o en un pueblo, pregunten por alguien respetable y hospédense en su casa hasta que se vayan. Al entrar, saluden así: ‘Que haya paz en esta casa’. Y si aquella casa es digna, la paz de ustedes reinará en ella; si no es digna, el saludo de paz de ustedes no les aprovechará.
El saludo de paz, consiste en explicar lo que van a realizar, o el trabajo que van a desempeñar, pues la paz, es algo que hay que ejercerla, por aquello que está escrito: " aunque hiciera grandes sacrificios como arrojar mi cuerpo a las llamas, si no tengo amor, nada soy, etc,
Y si no los reciben o no escuchan sus palabras, al salir de aquella casa o de aquella ciudad, sacudan el polvo de los pies. Yo les aseguro que el día del juicio, Sodoma y Gomorra serán tratadas con menos rigor que esa ciudad”.
Cuando una persona con buenas intenciones de ayudar al prójimo es rechazada – puede sentirse desanimada, y para que eso no ocurra, sacudirse el polvo de los pies es una acción descontaminante de lo negativo – entonces podemos seguir caminando libremente.
Y lo más importante de está forma de predicar que muy poco se utilizó, es que, Jesús siempre estará con nosotros en todo momento, ya que El será quien sane y dará el entendimiento a quien quiera. ( Allí donde dos o más se reunan en mi nombre, Yo estaré en medio de ellos )
LA BIBLIA EXPLICADA 
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